El piercing
(palabra que significa atravesar o agujerear) se ha convertido en un arte en todo el mundo. Muchas personas se han sumado a la
moda de tener un adorno haciéndose una perforación en la piel. Sin embargo, una mala práctica de esta
técnica puede acarrear graves consecuencias de salud. Es importante conocer los cuidados precisos para antes y después
de someterse a la colocación de este adorno corporal. En primer lugar, es aconsejable evitar ciertas zonas del cuerpo como son los labios, la
lengua, el ombligo y los genitales. No es recomendable colocarse un piercing si se tiene
dermatitis, acné o tendencia a cicatrices queloides, verrugas, herpes, o algún
tipo de infección bacteriana cutánea, o psoriasis; tampoco si se tienen
alergias de contacto o si se está tomando anticoagulantes, se padecen
alteraciones sanguíneas o enfermedades cardiacas congénitas. Además quien
decide llevar un “piercing” debe estar vacunado contra el Tétanos.
Es importante saber que las agujas deben ser estériles y de un solo uso (tienen que
estar envasadas y selladas hasta su utilización); se debe limpiar y desinfectar
la zona del cuerpo en la que va a colocarse el piercing; no se deben utilizar pistolas
perforadoras salvo para el lóbulo de la oreja; y el material permitido del
adorno, para evitar alergias o rechazo, debe ser de acero quirúrgico, oro
(mínimo de 14 quilates) o titanio.
Además, el aplicador
debe lavarse las manos antes y después de la práctica, usar guantes estériles y
de un solo uso, utilizar ropa y calzado limpio (de uso exclusivo), no fumar,
comer o beber mientras realiza el trabajo y cubrirse los cortes, heridas,
quemaduras u otras lesiones.
Si hay algo que siempre queda bien en el
cuerpo, además de un tatuaje, es una perforación.
Claro que hay zonas que se lucen mucho más que otras por estar siempre a la
vista, pero no hay dudas de que llevar un piercing es algo
que seduce a muchas personas.
Perforar nuestra piel es una práctica muy
antigua que cada vez se desarrolla más, ya sea por un motivo o por otro la
gente se anima a llevar piercing en
lugares jamás pensados anteriormente.
Seguramente, y si has llevado perforaciones
puede que te interese más, existen varios datos muy
curioso sobre los piercings que quizás no conozcas ¿quieres
saber cuáles son? Aquí te los presentamos:
El piercing más común de
todos los que conocemos actualmente, es el piercing de oreja.
Incluso, para nuestra sorpresa, se utiliza desde el 2500 a.C.
Lo más curioso aun, es que si bien este es muy común entre las mujeres, también
fue utilizado por hombres a lo largo de la historia como Julio César, William Shakespear,
y
Francis Drake, entre otros.
En algunas culturas africanas, como por
ejemplo la tribu Mursi, se da una
práctica de piercing muy particular que consiste en insertar un disco en el
labio inferior desde la niñez. Si bien esta práctica puede llamarse de otra
forma por no tener perforación, que es lo que precisamente identifica al
piercing, muchos la denominan así igualmente. El disco puede sobrepasar los 15 cm de diámetro... ¡Una locura!
Esto es algo que también ocurre en el sur de Asia, en algunos grupos religiosos. Muchos
integrantes suelen hacerse piercing muy riesgosos para su propia salud pero tradicionalmente
aceptados. De todos modos no imagines lo peor, los más comunes suelen ser los
de la nariz.
El ombligo es el preferido
Un estudio realizado en Inglaterra revela que
un 10% de las personas mayores de 16 años llevan un
piercing en su cuerpo. En primer lugar entre las preferencias,
se encuentra el piercing de ombligo,
seguido del piercing de nariz y oreja.
Los piercing de lengua suelen ser muy sexis,
¿pero sabías que pueden producir una separación en tus dientes
frontales? Esto es algo que se ha estudiado en personas que
llevan este tipo de piercings y que se produce por el empuje realizado por el
metal contra los incisivos.
¡Dan placer!
El Kama Sutra,
además de tener recomendaciones de todo tipo para disfrutar del sexo, también
tiene recomendaciones sobre qué tipo de piercings son los
mejores para obtener mejor placer mientras lo practicas. Hablamos sobre todo
del piercing apadravya,
que atraviesa el glande.
Yo en lo personal tengo varios piercing y es
un arte que me encanta, claro para mi cada uno tiene su significado en el
ombligo yo reflejo
rebeldía, intentando generar un impacto en una sociedad que no
les gusta. Muchos jóvenes lo hacen también por contrariar a sus familias,
especialmente cuando la relación con ellos no es buena. Además, algunos
adolescentes declararon hacerlo para diferenciarse de sus padres, y cuando
estos rechazan la práctica, más deseo tiene de realizarla.
También tengo uno en mi cartílago de la oreja
derecha que cabe decir que El cartílago es la zona dura (por así decirlo) de
nuestras orejas (aclaremos que no es la única zona cartilaginosa, sino que las
hay muchas en nuestro cuerpo). Se caracteriza por su textura más rígida y su
consistencia de carácter denso, también lo podemos encontrar en la zona de las
costillas, en la nariz, en las orejas, en la garganta e incluso en nuestra
espina dorsal.
Hay tres tipos de cartílago: hialino,
elástico y fibroso. Nuestras orejas son atravesadas a la altura del cartílago
elástico (la nariz es de cartílago hialino, que es más duro). Como no tiene
muchos nervios a su alrededor, es un piercing que no duele mucho, aunque cuesta
mucho hacer la perforación, pues la superficie es bastante dura.
